Salimos del colegio no sin antes recordar aquellas preguntas y premisas que habíamos estado preparando en la sesión anterior, intentando siempre que el acercamiento a los mayores fuese el más acertado, que aprendiésemos a empatizar con ellos y que sobre todo que disfrutásemos escuchándoles.
Las sensaciones nada más llegar fueron muy buenas pues entre unos cuarenta o cincuenta "abuelos" nos estaban esperando deseosos de ver aquellas actividades que habíamos preparado para esa tarde.
Después de una breve presentación al grupo, algunos de nuestros chicos nos deleitaron con unos trucos de magia que dejaron a los mayores y a los demás compañeros que les acompañábamos con la boca abierta. Incluso alguna valiente se atrevió a participar con nuestros magos durante el espectáculo haciéndonos pasar uno de los mejores momentos de la tarde.
Después de haber roto un poco el hielo con esta actividad, nos dividimos en parejas para poder charlar un poquito con cada uno de ellos antes de que llegase la hora de la merienda. Todos los "abuelos" estaban estusiasmados por poder contar sus cosillas a los chicos y los chicos, a su vez, disfrutaron escuchándoles y haciéndose fotos con ellos para poder elaborar un detalle que les llevaremos en nuestra próxima visita, que teniendo en cuenta el éxito que ha tenido ésta... ¡no creemos que tarde en llegar!
A la hora de la despedida, tanto los mayores como los responsables del centro, agradecieron a los GRyS del colegio la tarde tan agradable y al mismo tiempo diferente que les hicimos pasar, aunque no sabemos quiénes fueron los que más recibieron si los jóvenes de nuestro cole o los mayores a los que visitamos.
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